Ingresando a cuidados intensivos...

Los síntomas.

Sentía cálido el pecho, acentado hacia el costado izquierdo. Un poco acelerada pero dificultosa la respiración.
Una semana después estas manifestaciones habían cambiado por una punzada aguda en su estómago, y nuevamente en el costado izquierdo del pecho.

La causa.

Algún agente externo con el que tuvo contacto en días anteriores.

El pronóstico.

Reservado, los especialistas en esta materia son inexistentes. Sin embargo no se descarta una pérdida de fe evolutiva.

Tratamiento.

¿alguien conoce un sucedáneo de marcapasos?

El misterioso caso de un lagarto con celular

Los abuelos cuentan que para “ligar” en sus años eran típicas las vueltas al parque, donde al cabo de una vuelta un grupo de hombres y mujeres se topaba, se saludaba y en eso consistía todo el cortejo.
Nuestros padres asistían a bailes, y se “copaban” por ahí. Nosotros empezamos a “apretar”, y los medios para conocer pareja cada día se vuelven más diversos.
No es de asombrarse que para muchos funcione hoy en día un foro, los chats, e incluso algunos blogs.
De hecho (jugando a abogado del diablo) me parece absolutamente risible la gente que recurre a medios como éstos con la única premisa de “ver qué sacan”. Por otro lado es muy probable que “socializando” (por así decirlo) con personas en un foro, por ejemplo, se percate uno de afinidades y a la larga terminen el uno interesado en el otro.
Y aunque este segundo caso me parece poco frecuente, no podría tildarlo de extraño ni “malo”. Confieso que yo mismo me he visto interesado en algunas “personas virtuales” que al momento de adquirir su forma física ya no se me antojan tanto, y no por el físico estrictamente sino por cuestiones de personalidad, química o lo que se les antoje pensar acá.

Lo que si me llama fuertemente la atención (así voy aterrizando al tema que me trae por acá) es la “táctica” de hacer uso de mensajes "SMS" a desconocidos para hablarse y citarse, conocerse, etc.
A mi ya me ha pasado dos veces que con el cuento de equivocarse con un mensaje empiezan a querer “hacer amistad” (get a fucking life!!), o bien, en otra ocasión me contactó una “Fulana” con la historia de conocerme sin que yo supiera quien es ella, y que había conseguido mi número para ponerse en contacto por mensajes conmigo… y me pregunto: ¿adónde se ha visto tal absurdo?
Una cosa es idealizar a alguien de un foro, de un blog y haberle visto “virtualmente” por ahí en alguna foto que ande en Internet, y otra muy distinta caer en “medidas desesperadas” como ligarse a un desconocido con el celular.



Lo peor del caso es que conozco gente que se ha embarcado a salir en estas condiciones. Con tal que luego no los vea en la portada del periódico porque murió misteriosamente asesinado… ¡pues todo bien!

Remozado

El Teatro Nacional no sólo estrenó iluminación sino que además ahora cuenta con nueva página para internet.
Hagan click si desean curiosear.

Hablando sobre planes para semana santa, playas y demás, un triste recuerdo vino a mi memoria.
Mis padrinos me dieron, tendría yo unos 5 años, un carrito (una ambulancia) que abría sus puertas traseras. Yo lo llevé conmigo a un paseo, y la cargué con un billete de cien colones. Entre juego y juego la enterré bajo la arena para luego rescatarla. El problema es que nunca apareció.

Si alguien llegara a encontrarla en estos días… ¿sería tan amable de devolvérmela?

¡Cuidado con los perros!

“You have to be trusted by the people that you lie to,
so that when they turn their backs on you,
you'll get the chance to put the knife in” (Waters, Gilmour)



Los perros están en todas partes… ¡alerta!

Anécdota sin sentido

Durante la mañana converso con un amigo y me cuenta de una universidad, la biblioteca, un link….

-¿Malmö? ¿Eso con qué se come?
– Es la ciudad.
– Ah ok, nunca había escuchado.

En la noche, de camino a mi casa saco el libro en el bus y me presto a leer: “Leyó en la prensa que el Nordsjärnan, de Malmö, zarparía esa noche del dique 3” (Emma Zunz, J.L. Borges).

Todos habremos tenido coincidencias sin sentido, y que en nada hacen peor o mejor el día, pero nos hacen gracia. Este es un ejemplo. Sonreí y seguí mi lectura.